La música es bastante importante en mí día a día. En alguna ocasión me han preguntado que qué pasaría si un día me prohibieran el vino por motivos de salud. La respuesta es fácil, tendré que dejar de beber vino. Pasar del dicho al hecho creo que sería bastante más complicado. Obviamente.
Pero si un día me dijeran, mira, vas a sufrir una enfermedad progresiva que te va a dejar sordo, no tendrás ningún otro problema, pero vas a dejar de oír. Creo que me derrumbaría. Tendría que aprender a comunicarme sin escuchar las voces de mi familia, tendría que cambiar de trabajo, tendría que estar con los otros cuatro sentidos atento a lo que pase a mi alrededor.
Y ya no habría música.
Si, en mi mente seguirían sonando canciones, seguiría durante algún tiempo la música, pero creo que con el paso del tiempo se deformarían o me quedarían estrofas rayadas por los siglos de los siglos, como si se tratasen de un disco de vinilo rayado.
Pero de momento, eso no va pasar, ni dejaré de beber vino (siempre con moderación) ni dejaré de escuchar música (sin medida).
Siempre he creído que hay una canción para un vino o que hay vino para muchas canciones, más allá de la tópica Red red wine de Neil Diamond, que luego popularizaron los UB40. Desde el nacimiento del blog, hay una de mis listas de reproducción de Spotify que he colocado a la izquierda de la pantalla. Si tenéis Spotify la podéis escuchar sin problemas, si no, creo que salta automáticamente un reproductor web que cierra automáticamente la ventana, estoy intentando enterarme para ver si desde aquí puedo cambiarlo.
El caso es que si el vino transmite emociones y la música también, si las palabras bien sean escuchadas o leídas a su vez hacen la misma función, he decidido que en la medida de lo posible, voy a “maridar” vino, música y palabras. Sé que cada uno tiene sus gustos, pero espero que os guste.
A partir de ahora, el encabezado de cada entrada traerá un botón como el que está en la parte superior de la entrada. Al pulsarlo, sonaran dos, tres, cuarenta canciones que de alguna manera acompañará tanto a las palabras como al vino.
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